Nuestro primer tutorial :D
¡Buenas tardes! Espero que este lunes hayáis tenido un buen comienzo de semana. Después de pasar mucho frío en Viladecans (gracias a los valientes que se atrevieron a venir :D) hoy os traigo un tutorial que empecé a preparar la semana pasada.Es el primer tutorial que preparo, y quizá no es lo que os esperabais (casi no hay que coser), pero es algo que podéis hacer fácilmente en casa, adaptándolo a lo que tengáis, y además reutilizando materiales. Incluso podéis hacerlo con vuestros hijos si tenéis. En fin, sin más preámbulos, aquí os lo presento:
Como transformar una caja de fruta (en este caso una de mandarinas y otra de fresas) en una preciosa caja que podéis usar para lo que queráis. Nosotros las usaremos para llevar nuestras ovejitas y otros muñecos a las ferias, así que tienen un aire romántico y rústico a la vez, para que se sientan a gusto.
Materiales que necesitamos:
Una o varias cajas de madera pequeñas, de las típicas en las que vienen los fresones por ejemplo. Antes de pintar, recomendable lavarlas bien con agua y jabón, y dejar secar por completo. Si son como la de arriba, os ahorráis una o dos capas de pintura, según el color que queráis usar.
Papel de periódico para cubrir la mesa, un bol o recipiente para mezclar cola/pintura, un vasito con agua, cola blanca, una lija, pinceles, brochas y cualquier cosa que os sirva para pintar o decorar.
Pinturas: en mi caso, acrílicos y una pasta dorada, pero también saqué mis ceras líquidas (que ya estaban secas U_U) y tintas de colores, porque quería darle un aspecto algo envejecido o vintage.
Material extra que no sale en la foto: un retal de tela y cintas de raso, hilo y aguja, lápiz o marcador para tela, tijeras.
Paso 1: extendemos el papel de periódico sobre la mesa. Encima, lijaremos suavemente la superficie de la madera, así quitamos astillas y suavizamos un poco los bordes.
Paso 3: Aquí empieza lo divertido. Hay que elegir el color que queremos de base para la caja. A mi me gusta experimentar y hacer cosas raras, así que en este caso he escogido tres colores y los he aplicado sin mezclar por completo. El resultado os sorprenderá: un precioso color turquesa completamente uniforme. Si usáis acrílicos o témperas, acordaros de añadir un poco de agua para que la aplicación sea más fluida, y la capa sea más fina. Así también se reduce el tiempo de secado y podéis dar otra capa si es necesario. de nuevo, dejamos que se seque por completo.
Paso 4: Yo he optado por aplicar una pasta decorativa en color latón, que era lo que tenía a mano y se ajustaba al efecto que buscaba, pero podéis usar pintura en otro tono aplicada con muñequilla o brocha, tintas, betún de judea, pintura de dedos, purpurina, pegatinas...¡lo que se os ocurra! En mi caso está aplicada con pincel seco, y hace que se noten los relieves de la superficie de la madera y que resalten los elementos metálicos.
Finalización: En algún momento en que tengáis la caja de madera seca (antes de empezar, o en algún momento intermedio) podéis cortar la tela para forrar el interior de la caja. El sistema se me ocurrió sobre la marcha (la idea era forrarla de otra manera) y me gustó porque si me canso del estampado de florecitas, puedo cambiarlo por otro en cualquier momento. Ponemos la tela debajo de la caja y marcamos unas pestañas con el lápiz o el marcador para tela. Debemos respetar las dimensiones de la base, asegurarnos de que las pestañas sobrepasan en al menos 1 cm la altura de los laterales de la caja. Pero se puede hacer a ojo perfectamente. Cortamos la forma. Si queremos cosemos un dobladillo, pero nosotros vamos a dejar que se deshilache un poco.
En cada pestaña coseremos por el revés de la tela una tira de cinta de raso a cada lado, a medio centímetro del borde superior de cada lateral, para poder atarla luego a la caja con lazos. Aquí podéis ver el resultado:
Como podéis ver, las ovejitas están muy cómodas en su cajita....
Aquí una cosecha de ovejitas frescas ¡listas para el reparto diario! :D
Espero que os haya gustado este primer tutorial ovejil, si tiene éxito haremos alguno más con las cositas que se nos ocurren.
¡¡Me encanta!! Me chiflan los colores que ha elegido, y también el estampado de la tela y el efecto deshilachado de no coserla. Si algún día consigo una cajita de esas, no dudes que haré algo similar :D
ResponderEliminarPor cierto, muchas gracias por tus consejos con la máquina de coser. Cuando empiece a utilizarla, veré esos vídeos que me comentas.
¡Un beso!
Pero qué chuladaaa!!! Me encanta tanto el color que le has dado a la caja como la tela de florecitas ^^ Realmente fácil de hacer! Gracias por la idea!
ResponderEliminarQue bonita ha quedado!!!
ResponderEliminarMe encanta como te quedo...jejeej las ovejitas se ven alli comodosimas...besines
ResponderEliminarQueda precioso, ademas parece fácil de hacer, y la idea de poder cambiar la tela es muy buena!
ResponderEliminarUn abrazo!
Es una muy buena idea para un expositor además me gusta que se reutilice material :)
ResponderEliminarMe encanta!!
ResponderEliminarlas cajas de frutas son las grandes olvidadas y se pueden usar para mil cosas! yo el año pasado me apañé un par como macetas para mis tomatitos cherry, y el resultado fue estupendo! las pinté con un rojo chillón y ahí siguen frescas y lozanas! Están hechas con madera maciza los laterales y chapa de fibras la base, y esto hace que sean super resistentes! Así que seguro que aguantarán a todo tu rebaño! :P
Pero que DIY más fantástico! Me encanta el concepto, el resultado y la explicación perfecta :D
ResponderEliminarMiauuuuubesitos artista!
Chulisimo!!!! Me encanta! Gracias por una idea genial y por compartirla!
ResponderEliminarUn beso!